A diferencia de la tendencia a la normalización que siguen tarifas de transporte marítimo, a nivel global la congestión portuaria está lejos de emprender la retirada. Así, en Europa, los puertos están atascados porque los trabajadores portuarios están en huelga o de vacaciones prolongando la cola de buques a la espera por un sitio de atraque, a lo que se suma una gran escasez de camioneros. En tanto, en EE.UU., la congestión aumenta en la Costa Este (USEC) y permanece la escasez de capacidad ferroviaria y de espacio de almacenamiento provocando que los contenedores permanezcan en los puertos durante demasiado tiempo.
Crisis en Europa
La congestión portuaria en Europa ha ido en aumento desde mayo. Róterdam, el puerto de mayor tamaño del continente, lucha contra la escasez de camioneros y los contenedores que estaban destinados a Rusia, pero que están atrapados en el puerto debido a las sanciones.
En Hamburgo, el mayor puerto de Alemania, una serie de paros laborales a principios de este verano septentrional dejaron decenas de contenedores sin recoger. En Reino Unido, unos 1.900 trabajadores portuarios de Felixstowe inician una huelga este 21 agosto, lo que podría resultar en retrasos de dos semanas para las entregas de carga en gran parte del norte de Europa.
“Europa es un gran problema”, dijo Soren Skou, CEO de Maersk. “Los clientes no recogen sus contendores y hay una gran escasez de camioneros”, indicó. Sea-Intelligence señaló que, en junio, el 9,3% de todos los contenedores quedaron atascados en buques o terminales, casi cinco veces más que el promedio mensual de la década anterior. Mientras que fuentes del sector señalan que más del 15% de los conductores de camiones en toda Europa provenían de Rusia o Ucrania antes del estallido de la guerra. La fracción de esos camioneros fue reemplazada por otros de diferentes países como Bulgaria y Rumania.
Crisis en la USEC
El temor ante posibles huelgas de trabajadores portuarios en los puertos de Los Ángeles y Long Beach, California, llevó a los beneficiarios de carga a trasladar algunos envíos a los puertos de la USEC, incluidos los puertos de Nueva York, Nueva Jersey y Savannah, en el estado de Georgia. Como resultado, los volúmenes de contenedores en los puertos de la USEC durante los últimos tres meses aumentaron un 19% con respecto al mismo período del año pasado, según datos de Xeneta.
Lo anterior ha provocado retrasos de cinco días en el atraque en Nueva York y Nueva Jersey, generando una cola de unos 20 buques y de más de una semana en Savannah, donde espera una cola de unos 40 portacontenedores. Además, la afluencia ha dejado el Puerto de Nueva York y Nueva Jersey atascado con alrededor de 200.000 contenedores vacíos que esperan ser recogidos por las líneas navieras.
Mientras tanto, en el Puerto de Housto, Texas, un destino en crecimiento para los buques de Asia que viajan a través del Canal de Panamá, contabilizó 25 buques portacontenedores en cola hace dos semanas. Además, los contenedores de importación están permaneciendo un promedio de seis a siete días, el doble de lo habitual, antes de ser recogidas y llevadas a los centros de almacenamiento.
Peter Sand, analista jefe de Xeneta, observa la situación: “A medida que más buques y carga se dirigen hacia el este, la cadena en este lado del país se ve presionada y hay un precio que pagar en términos de confiabilidad”.
Situación en la USWC
En la Costa Oeste de EE.UU. (USWC) en los Puertos de Los Ángeles y Long Beach la cola de buques en espera se ha reducido a números de un dígito según los últimos informes y el crecimiento de la carga se ha desacelerado. Sin embargo, más de 33.000 contenedores esperan ser cargados en los ferrocarriles que adolecen de suficientes conductores y locomotoras para mover la carga a centros de distribución del interior como Chicago.
¿Posible alivio?
El final del verano septentrional suele ser una temporada alta de importación vía marítima para EE.UU. a medida que los minoristas ordenan productos para las vacaciones de otoño e invierno. Sin embargo, muchos importadores hicieron pedidos a proveedores en Asia y Europa a principios de 2022, por temor a que se repitieran los retrasos en los puertos en la USWC del año pasado. No obstante, en el actual contexto de desaceleración del gasto de los consumidores, los grandes minoristas ahora están recortando los pedidos dada la sobrecarga de inventarios.
La Federación Nacional de Minoristas advirtió la semana pasada que se espera que los envíos minoristas retrocedan en la segunda mitad de 2022, luego de los volúmenes récord a principios de este año.
0 Comments